Empezamos desde Roncesvalles y por fin
hemos llegado. Ha sido un reto fenomenal y una alegría
haberlo acabado, para mi marido es la segunda vez. No tenemos motivos
religiosos aunque seguimos todos los trámites de los sellos".
"Nosotros llegamos caminando desde
Ponferrada. Es un reto que ofrecemos a Santiago, pero también es una ofrenda
por todo lo que Dios nos da a cada uno.
Mis pies cansados y doloridos dan un
descanso por los que no pueden llegar. He llegado con mis hermanos que también
son un regalo de Dios".
Rosa Contreras